[Narra
David]
Había
quedado con Clara. ¡Por fin! Hacía muchísimo que no veía a mi
princesita y la echaba de menos. Hacía dos meses que empezamos a
salir en secreto. Los chicos no sabían nada y quería hacerlo ya
oficial. Clara era de mi pueblo, había crecido junto a ella, la
conocía como si fuera mi hermana. Clara siempre fue como mi mejor
amiga, aunque sabía siempre lo que sentía por ella aunque los dos
siempre teníamos parejas distintas y de una forma u otra causábamos
un daño colateral a nuestra relación, por no decir que llegamos a
romperla por culpa de un novio de Clara. Todo eso pasó justo cuando
decidí venirme a Madrid, a seguir mi sueño, a poder sacar en
adelante mi carrera como cantante. Mis problemas se esfumaron cuando
conocí a estos cuatro chicos que de la nada se convirtieron en mis
hermanos e hicieron que me olvidara de Clara.
El
tiempo pasó y volví a encontrármela por las calles de Granada.
Estaba igual aunque un poco más crecidita y muchísimo más guapa. A
partir de ese día, seguíamos en contacto hasta que un día
decidimos quedar en Granada ya que tenía allí una firma del nuevo
CD. Aquel día nos sinceramos los dos, y decidimos empezar algo
aunque yo estuviera recorriendo media España cada dos por tres. Pero
ella, hoy, estaba aquí, en Madrid.
El
timbre sonó. Me levanté confuso. ¿Quien era? No esperaba a nadie.
Oh, una cosa que no os he contado. Al Álvaro irse a Roma con Mimi,
decidí que era hora de mudarme a un nuevo piso que conseguí en la
ciudad. Los chicos eran mis hermanos pero necesitaba un poco de
relax, como todos, ya que estábamos más de 24h juntos. Total, abrí
la puerta y allí estaba. Mi rubia, parada delante de mi puerta, con
una sonrisa de oreja a oreja. Me quedé helado, totalmente pasmado.
-Oh,
dios mío. -Dije al verla allí- ¿Porqué no me has dicho que
venías?
-Era
una sorpresita. -Sonrió- ¿No me vas a dejar pasar o que? -Dijo
cruzándose de brazos-
-Claro
que si, ven aquí tonta. -Dije mientras cogía sus maletas y ella
entraba-
-¡Wow!
Es más bonita de lo que me habías contado -Dijo mirando por todos
lados de la casa- ¿Y esto lo has decorado tu solito?
-Claro.
¿Que esperabas? -Alcé las cejas-
-No
puedo creer que mi novio tenga tan buen gusto. -Después de haber
dicho eso se ruborizó-
-¿Como
me has llamado?
-Novio
-Me miró picarona- ¿A caso no te gusta? -Negué rápidamente-
-No
me gusta, no. Me encanta. -Sonreí-
-Me
habías asustado lelo. -Dijo pegándome en el pecho- Eres un lelo.
-Este
lelo te quiere desde chiquito. -Le saqué la lengua-
-Lo
se. -Me besó- Te he echado mucho de menos.
-Y
yo también. ¿Que tal si me voy a cambiar y nos vamos a dar un
paseo? Así te enseño Madrid.
-¡Me
parece estupendo! Venga va, sube a cambiarte. Yo te espero aquí.
Subí
rápidamente a cambiarme. Me puse unos tejanos, una camiseta negra
con el estampado rojo de rompe ralph y mis queridísimas bambas. Cogí
una chaqueta y una bufanda ya que hacía frío. Me eché un poco de
colonia y me peiné. Cuando bajé me encontré a Clara mirando los
cuadros de fotos que tenía en la entrada. Me acerqué sigilosamente
hacia ella y le abracé por la cintura.
-Son
bonitas estas fotos -Dijo mirándolas- Has cambiado. -Sonrió-
-Lo
se, ahora soy mucho mas feo -Dije apoyando mi barbilla en su hombro-
-No
seas tonto, ahora estas más guapo. Me encanta esta foto -Dijo
cogiendo el marco donde salíamos ella y yo de bebés dándonos un
beso en la boca-
-Ya
apuntábamos maneras ¡Eh! -Dije apretándola más a mi cuerpo-
-Quien
iba a decir que al final, acabaríamos juntos -Esbozó esa sonrisa
tan perfecta que tiene- Te quiero muchísimo negri -Dijo mientras se
giraba y quedábamos completamente pegados-
-Yo
también te quiero rubita. -Le besé- ¿Has desayunado? -Negó- Pues
vamos a desayunar algo por ahí y te enseño mi bella Madrid -Sonreí
y le cogí de la mano-
Fuimos
hasta una panadería. Allí desayunamos en paz, riendo y contándonos
anécdotas de cuando eramos chicos. Sin duda, esta chica me traía
loco. No se porqué. La amaba como una novia, la quería como una
amiga y la protegía como si fuera su hermano. Ella sabía
perfectamente descolocar mi mundo y ponerlo patas arriba en cuestión
de segundos. Su visita no me la esperaba. La tenía aquí, delante
mío comiéndose una ensaimada con colacao. No podía dejarla de
mirar. Era mi chica. Acabamos de desayunar y la llevé por los
lugares más hermosos de Madrid. Pasamos por la puerta del sol y
Clara se quedó maravillada. Seguimos andando cogidos de la mano. De
vez en cuando habían fans que me paraban para que me hiciera fotos
con ellas, y encantado lo hacía. Amo a mis fans. Clara nos echaba la
foto, contenta.
Llegó
la hora de comer, así que decidimos ir a comer a casa, antes de que
los pesados de los paparazzi nos pillasen. Queríamos ir en serio,
pero tampoco tanto para salir en las revistas y todo ese rollo. Hice
el plato preferido de Clara, milanesa con papas fritas. ¿Original
verdad? Eso es lo que me atraía de Clara, lo que siempre me atrajo,
su sencillez ante las cosas y lo poco complicada que era. Mientras la
carne se freía, puse la mesa. Una vez las patatas y la carne estaban
listas, hicimos un poco de ensalada y nos pusimos a comer. Encendimos
la tele y Clara puso los 40 TV. Comimos en silencio, como siempre
solíamos hacer. Al acabar, lavamos los platos y nos sentamos en el
sofá.
-¿Quieres
ver una peli? -Le dije-
-Si
-Contestó emocionada-
-¿Cual
quieres ver? -Pregunté- Tengo Harry Potter, Un paseo para recordar,
El diario de Noa, Titanic, Rompe Ralph, El cuerpo... Tu elijes
-Sonreí-
-Un
paseo para recordar, por favor -Se sonrojó, sabía que esa era su
preferida-
-¿No
te cansas nunca de verla?
-No,
es que están... perfecta. -Dijo finalmente y se acurrucó a mi lado-
Nos
pusimos a ver la película, mi móvil no paraba de vibrar, así que
cansado vi que querían los pesados estos. ¡Ni un minuto de
tranquilidad!
-Chicos,
Mimi y yo os tenemos que contar algo, quedamos esta noche a las diez
en casa ¿Vale?
-¿Que
es? -Dijo Carlos, tan cotilla como siempre- ¡Pero cuéntalo ya!
-No,
es algo que queremos contar los dos. Os esperáis hasta esta noche.
Por cierto, vamos a comprar cena. ¿Que queréis?
-Lasaña
por favor. -Dijo Blas- Hace mucho que no como...
-Yo
hace mucho que no como las lentejas de Blas -Dijo Dani- ¿Cuando las
vas a hacer? Quiero comerlas!!!!!!!
-Pues
te vas a joder, porque para ti no hay :P -Bromeó Blas-
-Okai...
-Dijo Dani-
-Bueno,
bueno, no os peleeis, solo os digo que es una buena noticia, por lo
menos para mi y Míriam. Esperemos que os guste.
-Joder
Álvaro! -Puso Carlos- No dejes con la intriga cacho cabrón.
-¿A
que te quedas sin postre? -Dijo Álvaro-
-Si
hombre... me traeré chocolate de casa ;)
-Haz
lo que te salga del ojete -Dijo Álvaro- ¿David estas vivo?
-Eso,
eso -Dijo Dani- HOLA DAVIIIIIIIIIIIIIIID?!
-A
lo mejor estará haciendo.. ya sabes que cosa ;) -Bromeó Blas-
-¿Os
queréis callar de una puñetera vez? Estaba viendo una película!!!
-Le puse la cara de enfadado- Por cierto, quiero que conozcáis a una
persona. ¿La puedo traer esta noche a tu casa Álv.? -Le pregunté-
-Claro
que si, no hay problem :D
-Vale,
voy a seguir viendo la peli. Chao.
-Si,
si, escaqueate maricón ;P -Dijo Carlos y dejé de leer-
Apagué
el móvil y lo tiré en la mesita que había al lado del sofá. Clara
se había quedado dormida, así que la llevé a mi habitación y la
estiré con cuidado a un lado de la cama. La verdad es que yo también
tenía un poco de sueño, así que me estiré en el otro lado de la
cama y me quedé completamente dormido. Me desperté sobresaltado.
¿Que hora era? Encendí mi móvil. Por suerte solo eran las ocho y
media. Desperté a Clara con cuidado.
-Amor,
despierta. -Dije mientras le daba besos por toda la cara-
-Mmmm
-Gruñó- Cinco minutos más por favor.
-No,
va levantate. -Dije acariciando su hermosa cara- Tenemos que ir a
casa de Álvaro, nos tiene que decir una cosa y... -Hice una pausa y
Clara abrió lentamente los ojos- quería aprovechar para
presentarte.
-¿Estas
seguro? -Me preguntó y asentí lentamente con la cabeza-
-Más
seguro que nunca, a parte, tu ya conoces a Dani. Así que no pasa
nada -Sonreí-
-Como
tu quieras mi amor. -Me besó- Si tu quieres presentarme, yo no tengo
ningún problema, así nos sacamos ya un peso de encima y no hace
falta que les mientas más para quedar conmigo -Sonrió-
-Eres
un amor.
-Aprendí
del mejor -Sonrió y me besó-
Nos
fuimos preparando para ir a casa de Álvaro y Míriam. Clara llevaba
bastante tiempo encerrada en el baño, preparándose.
-Claris
-Dije desde el otro lado de la puerta- No hace falta que te arregles
mucho, eres divina.
-Oh,
venga David. -Dijo abriendo la puerta- Quiero dar buena impresión
-Uou.
-Me quedé parado mirándola. Iba preciosa- Estas... Estas...
Preciosa -Conseguí decir finalmente-
-Gracias
-Se sonrojó-
Llevaba
un vestido azul turquesa, era pegado al cuerpo y llevaba un hombro
descubierto. Se planchó el pelo y se lo recogió en una coleta alta,
iba muy poco maquillada y sin tacones. Eran ya las nueve y media, así
que decidimos ir tirando. Notaba a Clara nerviosa, así que la
abracé. Fuimos todo el rato abrazados hasta que llegamos a casa de
Álvaro. Tocamos el timbre y Míriam nos abrió.
-Hola!
-Dijo Míriam bastante emocionada-
-Hola
pequeña -Dije abrazándola-
-Hola
-Dijo Clara, un poco timida-
-Hola
-Dijo Mimi mirándola- Yo soy Míriam pero me llaman Mimi, encantada
-Dijo dándole dos besos- Soy la novia de Álvaro -Sonrió-
-Encantada
-Vi como sonreía- Yo soy Clara -Hizo una pausa-
-Es
mi novia -Dije y la volví a abrazar-
-Oh
que bien! -Dijo sin dejar de sonreír ni un momento- Me alegro por
vosotros chicos. Anda pasar, sois los primeros en llegar -Reí-
Poco
a poco fueron llegando los chicos con sus chicas. La mesa ya estaba
preparada y la comida encima de la mesa. Álvaro y Mimi se sentaron
juntos, a su lado se sentaron Carlos y Andrea, delante de Carlos se
sentó Blas y Eunice y a su lado nosotros dos, Dani y Hugo y Marta.
Empezamos a comer y no paraban de preguntar sobre nosotros dos. Clara
les respondía con bastante timidez. Pobrecilla.
-Entonces...
¿Que es lo que nos queríais decir vosotros dos? -Dije cambiando de
tema-
-Esto...
-Dijo Mimi y Álvaro le agarró la mano y se miraron-
-Estamos
embarazados -Dijeron los dos a la vez-
Carlos
escupió la bebida encima de Blas. Este empezó a gritar como un
desesperado por culpa de Carlos, las chicas se quedaron calladas,
Dani felicitó a los futuros papás y yo me quedé paralizado. Sonreí
y me acerqué a ellos deseándole lo mejor.
-Pero
que venga un bebé, no significa que Auryn vaya a desaparecer -Dijo
Álvaro intentando que los otros dos reaccionasen-
-Madre
mía. -Dijo Carlos- ¿No podíais esperar a que dejara de beber?
-Puso sus manos en su cintura. Parecía una nena-
-Eso,
me ha puesto perdido. ¡Que asco! -Dijo Blas mientras pasaba su
servilleta por la ropa y por la cara-
-Hay
hermanita -Dijo Carlos abrazándola- Me alegro muchito. La nena será
preciosa.
-Otro
como Álvaro. -Rió- ¿Que os hace pensar que será una niña y no un
niño?
-Pues,
somos muchos barones en esta sala -Dijo Hugo- Es normal que quieran
una nena.
-Vosotras
ya lo sabíais? -Preguntó Carlos a las chicas-
-Si,
nos enteramos esta mañana. -Dijo Marta-
Wow.
Sin duda, esta noticia nos iba a cambiar la vida a todos. ¡Íbamos a
tener una sobrina política! A Blas le costó, pero acabó
felicitando a la parejita, las chicas les desearon lo mejor y
empezaron a hacer planes por si era niño o niña. Me senté al lado
de Clara, que seguía bastante nerviosa. Le cogí la mano y le di un
pequeño beso en los labios que la tranquilizo por un momento, pero
muy poco ya que teníamos todas las miradas clavadas en nosotros.
Uauauuuu!!!! Me ha encantado el capitulo, ha sido perfecto.
ResponderEliminarEl escupitajo a Blas para partirse ya le vale a carlos!!! jjajjaa
Siguiente ya!!!
Me alegro que te gusten! jajajaja Y lo de Carlitos tenía que ponerlo! jajajajajaja espero subir capitulo hoy.
EliminarBesitos :)